El macal, la yuca, güisquiles, ayotes, plátanos, maíz, frijol, cacao y chiles chiltepe, cobaneros y habaneros, son algunos de los productos que se encuentran en los mercados campesinos, anteriormente denominados mercados solidarios. Estos mercados comenzaron a funcionar hace más de diez años, como parte de un movimiento promovido en Petén por la Pastoral Social, que impulsó Escuelas de Promotores de Desarrollo Integral.
En 2010, se creó una de las primeras escuelas en el municipio de El Chal. Allí, campesinas y campesinos de diferentes partes del departamento de Petén aprendieron sobre organización comunitaria, transformación de conflictos y producción agroecológica. Actualmente, algunos de estos promotores han fundado o participan en cooperativas y asociaciones destinadas a impulsar la agricultura ecológica y a mejorar la economía familiar y comunitaria.
La Cooperativa Integral Agrícola “El Sembrador Ecológico” —COOPISE-; la Oficina Municipal de Desarrollo Comunitario -OMDIC-; la Cooperativa Integral de Comercialización “Canahán” y las mismas Escuelas de Promotores de Desarrollo Integral son algunas de estas organizaciones. Los promotores que participan en ellas se han encargado de promover los mercados campesinos, por lo menos hasta antes de que empezara la pandemia.
Desde sus inicios, los mercados campesinos han tenido como objetivo el rescate de las prácticas agrícolas ancestrales, el aseguramiento de la alimentación sana y la promoción de prácticas de intercambio entre vecinos y comunidades, como, por ejemplo, el “pase en cadena”, que consiste en un intercambio de semillas para que las y los campesinos de las mismas comunidades o de áreas vecinas amplíen su banco de semillas y diversifiquen los cultivos. Con estas acciones se ha promovido también, indirectamente, la valoración de la tierra para que los comunitarios no la vendan a los ganaderos y palmicultores.
Cuando las y los campesinos empezaron a obtener excedentes de sus cosechas, los mercados solidarios y los intercambios de semillas se extendieron por muchos municipios de Petén y aún a varios departamentos de Guatemala, de modo que se fue logrando una motivación local de la práctica, en especial durante algunas fechas del año.
Antes de la pandemia se realizaban quincenalmente mercados campesinos en la región de Sayaxché y en algunas de las diez microrregiones que forman este municipio. Radio Sayaxché ha contribuido casi desde el inicio del proceso con programas motivacionales, en los cuales han participado como protagonistas los promotores agrícolas. En efecto, cada miércoles a las cinco de la mañana se les llamaba para que contaran su experiencia y compartieran sus saberes con la audiencia, y para que la motivaran a darle un valor a la tierra y a beneficiarse de las bondades que se obtienen de la diversificación de los cultivos.
Saber que los productos cosechados en las comunidades puede contribuir a la salud, a la seguridad alimentaria, a la economía de las familias del área rural y, sobre todo, saber que la diversificación de cultivos contribuye al sostenimiento y cuidado del medio ambiente, son razones suficientes para que Radio Sayaxché continúe promoviendo los mercados campesinos con transmisiones especiales, entrevistas, programas radiales de diferentes tipos y publicidad de los eventos relacionados con la práctica.
Debido a la pandemia han dejado de llegar productos al municipio de Sayaxché para surtir los mercados campesinos, pero la gente sigue capacitándose y transformando sus productos con fórmulas creativas y novedosas.
Las y los campesinos han buscado alternativas que les permitan seguir vendiendo sus cosechas, por ejemplo, para las refacciones escolares. Asimismo, se están organizando para abrir una tienda comunitaria, que funcionará en el casco urbano de Sayaxché, con lo cual han encontrado una opción beneficiosa, que les permitirá minimizar los costos de trasporte, los cuales se han elevado al doble por las restricciones de distanciamiento físico que exige la prevención de la pandemia.
