Hilda Ruth Flores Muñoz
El siglo XXI demanda ciudadanos con competencias que les permitan participar exitosamente en la sociedad. Algunas de estas competencias son: creatividad, pensamiento crítico, comunicación, carácter, colaboración, ciudadanía responsable y competencias digitales. En el ámbito educativo se requiere que los profesores posean estas capacidades para que sean capaces de ayudar a sus estudiantes a desarrollarlas.
Un profesor que evidencia poseerlas, se preocupa constantemente por su proceso formativo, porque está consciente de que su práctica incidirá en sus estudiantes y, por ende, en la sociedad. En este contexto, y en plena sociedad del conocimiento global, los profesores se ven a sí mismos como diseñadores de experiencias, más que como simples “transmisores” de información.