Aldo Moro

La pandemia de COVID-19 nos ha afectado en muchos ámbitos de la vida cotidiana, incluyendo el educativo. Sin embargo, cuando hablamos de educación a distancia, modalidad que introdujo el Instituto Guatemalteco de Educación Radiofónica –IGER- hace cuarenta y dos años, sin duda encontramos respuestas a las dificultades que actualmente impiden la educación presencial. Por esta razón, la educación a distancia está en auge en este tiempo de pandemia y son muchas las instituciones educativas que desean implementarla.

Sin embargo, no es tan solo en circunstancias excepcionales que la educación a distancia se convierte en respuesta. En Guatemala, la educación aún está lejos de ser equitativa: son muchísimas las personas que no pueden obtener una educación de calidad, que las forme como sujetos críticos, volcados no solo a su preparación personal sino a la construcción de un mejor país.

Aunque se detuviera hoy la pandemia que inició hace un año, un gran porcentaje de la juventud guatemalteca no podría asistir a la escuela. Por poner un ejemplo, hay muchísimas comunidades donde las y los niños no pueden seguir estudiando después de terminar la primaria, generalmente en el sector público. Su futuro se ve limitado y no pueden soñar más allá de ser madres o padres de familia, trabajar en una empresa agroindustrial o migrar hacia Estados Unidos. Las precariedades en las que viven les arrebatan oportunidades para realizarse.

En muchas comunidades no hay institutos educativos que ofrezcan los ciclos básico y diversificado. Los costos de viajar a estudiar al casco urbano del municipio o a la cabecera departamental implican el financiamiento del transporte, la alimentación y, muchas veces, también el hospedaje. Si los estudiantes no encuentran cupo en un instituto público, tendrán que sumar los costos de colegiatura, que pueden representar más del 50% del salario mínimo, con el que muchas familias del área rural ni siquiera cuentan.

Así que, si los padres no tienen los recursos económicos suficientes para enviar a sus hijos a estudiar fuera de la comunidad, las y los jóvenes deben resignarse a no seguir estudiando. Se quedarán, definitivamente, solo con los estudios de primaria, a menos que encuentren una alternativa de educación a distancia,  como la que ofrece el programa El Maestro en Casa, del IGER.

Los servicios que provee el IGER a su estudiantado son muy buenos y accesibles económicamente. Los programas se basan en tres pilares definidos: los libros de texto, las clases radiales y las tutorías presenciales cada semana.

Puede afirmarse que en estos tiempos de pandemia los estudiantes del IGER no han salido tan afectados, porque cuentan con el material esencial: los libros de texto y una de las herramientas principales de la metodología de El Maestro en Casa, que es la clase radial. Aún la tutoría o sesión de orientación que en tiempos normales se lleva a cabo presencialmente en los círculos de estudio, ha podido mantenerse de modo virtual, utilizando aplicaciones tecnológicas básicas que usan los estudiantes, como WhatsApp.

Desde su fundación hace veintitrés años, Radio Sayaxché 91.7FM, ubicada en el suroccidente del departamento de Petén, ha venido transmitiendo las clases radiales del programa El Maestro en Casa. Estas clases están destinadas a los estudiantes, pero gustan también a quienes no lo son.

A veces, cuando se viaja en bus se puede escucharlas. Cuando el bus va de Sayaxché a Cobán o viene de Cobán a Sayaxché, a muchos pasajeros les encantan las clases que se dan en  idioma Maya Q´eqchi´, que es el que hablan mayoritariamente en el área y en el cual son escasas las producciones radiofónicas formales.

Las clases radiales que se transmiten por Radio Sayaxché son las que corresponden a la primaria en castellano, a la primaria bilingüe en idiomas Maya Q’eqchi’ y español, y al ciclo básico en castellano, que incluye algunas materias en idioma Maya Q’eqchi’.

La transmisión de las clases por Radio Sayaxché inicia a las 4:00 pm y termina a las 8:00 pm, de lunes a viernes. Las transmisiones llegan a las comunidades del sector norte del IGER, que es el área de influencia de la radio. En 2020 se inscribieron más de 4700 estudiantes en este sector. Ellos y sus compañeros en todo el país son los principales beneficiarios del arduo trabajo de producción de las clases radiales que realiza El IGER.

Las transmisiones se dan a nivel nacional a través de las emisoras del grupo Radial ASEC, del que forma parte Radio Sayaxché, y también a través de radios aliadas.